El bumping es una forma de robo, en la cual el ladrón puede abrir una puerta sin utilizar la llave del propietario y sin forzar la cerradura. Es una técnica muy utilizada y hoy se dará a conocer algunas de las razones por las cuales el bumping es una de las técnicas favoritas de los ladrones.

No deja rastros

Lo último que desean los ladrones es dejar alguna evidencia de su presencia en una casa que ha sido robada, y con el bumping, esto es posible, porque a simple vista, no ha ocurrido nada inusual en la vivienda en la cual fue ejecutado el robo.

De hecho, los propietarios viven la amarga experiencia de enterarse de que han sido robados, cuando abren la puerta de su vivienda, encuentran que todo está desordenado y que faltan sus objetos de valor.

Es que, esta técnica logra forzar la cerradura a nivel interno, porque burla el sistema de seguridad que proporcionan los pines, creando una situación en la cual estos pequeños elementos de seguridad pierden la estabilidad que garantiza que solo la llave correcta pueda abrir la cerradura. Mientras que en el exterior de la cerradura, es como si alguien introdujera una llave cualquiera, sin ningún tipo de forcejeo.

Es un procedimiento muy rápido

El bumping es una técnica que consiste en el uso de una llave de percusión y un martillo con el cual se pueda dar un golpe seco y preciso en la llave. En la opinión de los cerrajeros profesionales, lo que requiere más tiempo, es dominar la intensidad del golpe que se debe dar a la llave y poder abrir la puerta en tan solo unos segundos.

Una vez que el ladrón ha dominado la técnica, el abrir la puerta de una vivienda es algo que durará menos de un minuto, así que pasará desapercibida la presencia de personas ajenas a la casa. Los vecinos suelen ser una gran ayuda en este sentido, porque conocen quienes son las personas que habitan en la vivienda de al lado, sin embargo, esta técnica es tan rápida y efectiva, que no da la oportunidad de que los vecinos logren percibir algo fuera de lo normal.

Es asequible

La inversión que cualquier delincuente debe hacer para poder aplicar esta técnica de robo es mínima. Solo necesita un martillo, que es una herramienta básica en cualquier hogar, y si no tienen un martillo, este se puede sustituir con algún objeto sólido, que le permita dar un golpe seco y preciso a la llave de percusión, puede ser un destornillador, un trozo de madera e incluso una roca.

Por otra parte, es necesaria una llave de percusión, también le conocen como llave bumping o llave mágica, su precio es bastante asequible para cualquier persona, pero, lo más preocupante es la facilidad que existe para adquirir esta pieza. Porque su venta debería ser de manera exclusiva a los profesionales de la cerrajería, sin embargo, esto no se cumple a través de muchas tiendas online.

Ante todas estas cualidades del método bumping, los fabricantes de cerraduras y demás dispositivos de seguridad han logrado desarrollar cerraduras antibumping, con una estructura interna diferente, que no va a ceder ante este ataque.