Así como los sistemas de seguridad evolucionan con el pasar del tiempo, los métodos de robo de las viviendas han sido algo que ha experimentado una gran evolución.

Los cerrajeros afirman que, la necesidad de superar los avances tecnológicos aplicados a la seguridad ha llevado a los ladrones de viviendas a desarrollar técnicas que, en muchos casos, parecen sacadas de una película.

A continuación te estaremos contando sobre algunas de las más conocidas, y evitar que seas víctimas de las mismas:

1- El “Bumping”: Es la técnica más común, consiste en introducir una llave maestra y dar unos pequeños golpes con un martillo desde el exterior, lo que permite que el bombín de la cerradura y sus pernos salten y pueda entrar con total facilidad la llave falsa.

2- Impressioning (Calco, impresión): Esta técnica trata de introducir una lámina de aluminio en el bombín. Cuando introducimos la llave para abrir la puerta, ésta se queda calcada (impresa) en la lámina de aluminio, permitiendo crear un “molde” para poder fabricar una copia de la llave de la puerta.

3- El resbalón: Esta técnica también de uso frecuente por los delincuentes, utilizan una lámina de plástico (tarjetas de  identificación, tarjetas de crédito) para abrir la puerta cuando no hemos pasado la llave a la cerradura.

4- La ganzúa: Esta es otra técnica de uso bastante frecuente. Los ladrones meten una ganzúa, ganchos, alambres,  por la cerradura y abren la puerta fácilmente. Se ha visto que incluso puede ser usada en automóviles. Aunque la mayoría de puertas existentes en el mercado no pueden ser abiertas de esta manera, son especialmente vulnerables las que no son de seguridad.

5- El Imán: Es un método que parece sacado de una película de ciencia ficción; consiste en utilizar un potente imán para que los ladrones de viviendas puedan abrir una puerta que tenga las llaves puestas en la cerradura. Con ayuda de estos imanes logran hacer girar las llaves que están dentro desde el lado externo de la puerta y facilitando el ingreso a la vivienda.

Aunque existen métodos más complejos, así como también herramientas y artilugios, estos son los métodos más comunes que utilizan los ladrones de viviendas para acceder a la mayoría de inmuebles, pero aún así pueden aparecer algunos nuevos. Para no ser víctimas de alguna de estas, basta con cambiar nuestros hábitos o con preocuparnos de reforzar nuestras vías de acceso a la vivienda; pero solamente existe una manera fiable de proteger vuestra vivienda contra todos ellos a la vez: Una buena cerradura, un buen escudo de seguridad, y las precauciones habituales como pasar llave a la cerradura cada vez que salgas de casa.